El alegre drama de asistir a un recital en Chile

Desde que el Estadio Nacional cerró sus puertas por remodelación -en mayo de este año-, en Chile ha comenzado un fuerte debate por la escasa oferta de recintos habilitados para recibir una alta convocatoria de público; justamente ahora que el “boom” de recitales de grandes bandas internacionales ha copado la agenda de tiempo libre del chileno.

Iron Maiden, Depeche Mode y Los Fabulosos Cadillac, entre otras bandas, han visitado Chile durante los últimos meses y junto a ellos, las críticas por la falta de seguridad, mala visibilidad, problemas en los accesos y escasez de servicios básicos, entre otros, ha provocado el enojo de miles de fanáticos que, además de pagar altos precios por ir a ver a sus artistas favoritos, se encuentran con estas adversidades.

Existen varios estadios tanto en Santiago como en regiones. En la capital, los más famosos son: el remodelado Estadio Bicentenario de la Florida con espacio para recibir a 12 mil personas sentadas, Club Hípico (50 mil), Estadio Monumental (no se presta para actividades extra-deportivas), Santa Laura (20 mil), Movistar Arena (15 mil) y el mítico Estadio Nacional, con el máximo de capacidad (75 mil aprox.).

El problema surge en que muchas bandas exigen un mínimo de público, que en su mayoría supera la capacidad de muchos de estos estadios. Así, actualmente Chile cuenta sólo con el Club Hípico y, a veces, con el Movistar Arena.

Ya comienza a ser bullada la visita al país del popular cuarteto de Metallica y el conflicto sobre los recintos ya se ha iniciado. Los metaleros de San Francisco exigen un mínimo de 40 mil personas para realizar un show aquí y en cualquier parte del mundo, entonces las productoras comienzan a pensar en dónde pueden tocar. El elegido -hasta el minuto- es el Club Hípico que ya ha arrastrado varios dramas de los mencionados al comienzo, pero al parecer…”es lo que hay”.

Estudiando los problemas anteriores, existen cierto tipo de soluciones como, por ejemplo, hacer tres fechas en algún estadio de mediana envergadura como el Bicentenario o Movistar Arena; crear un recinto que pueda albergar a más de 40 o 50 mil personas y que tenga todas las comodidades para realizar eventos de gran magnitud. Pero la mejor de las ideas y la más viable, es utilizar los estadios de región como el Municipal de Concepción que tiene una capacidad de 40 mil asistentes, Estadio Sausalito de Viña del Mar -25 mil espectadores-.

Además de solucionar el problema, ayuda a la desregionalización del país y otorga un acercamiento cultural a la gente de región.

Para cerrar esta columna hago un llamado a los empresarios de éste país y al Estado, para que de una vez por todas solucionen este drama que ya se ha hecho crónico. En vez de construir Casinos por todo Chile, donde además de entretener, crean varios problemas económicos a muchas personas y sus familias; apoyen las artes y la cultura, ya que igual es un negocio rentable…así lo vemos en los precios absurdos que piden las productoras por traer a éstas bandas que tanto nos gustan…!pero eso es tema para otra columna!